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¿Qué es Sala Niebla?
Somos una comunidad y espacio para bebés, niños y niñas que guía y colabora en su crecimiento y desarrollo. Fomentamos la autonomía, con conciencia ecológica y social, respetando y cuidando nuestro flora y fauna, la cultura y las relaciones humanas.
Creamos una red de estimulación, juego y aprendizaje en comunidad. Nuestros valores: Respeto, amor, alegría, empatía, solidaridad, sinceridad, autonomía, paciencia, perseverancia y tolerancia, nos definen y dictan nuestro camino
Hola, soy Simona Serrano Muñoz
Educadora de Párvulos con mención en Educación Temprana e Interculturalidad de la Pontificia Universidad Católica de Chile
Gestora, Directora y Educadora de Sala Niebla
Entré a estudiar educación luego de diversas experiencias, voluntariados y viajes que fueron amoldando mis pensamientos e ideales en la vida. Me topé con infancias que me hicieron abrir los ojos y descubrí la posibilidad privilegiada que tenemos los adultos como docentes, para acompañar a niños, niñas y bebés a descubrir el mundo y todas sus relaciones.
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Decidí crear Sala Niebla con el objetivo de generar un espacio que respondiera a las actuales infancias; acorde a sus necesidades, sus intereses y a sus familias, tomando como referencias diversas aristas de pedagogías alternativas. Un lugar enfocado en el desarrollo integral de cada ser, donde se comparta la magia del autoconocimiento, la importancia de la cooperación, la empatía y el amor y respeto por nuestro entorno natural.
Hola, soy Javiera Méndez Astorga
Educadora de Párvulos con mención en Educación Artística de la
Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación
Co- Educadora en Sala Niebla
Mi experiencia con la niñez la comencé a tejer hace muchos años, en territorios dentro y fuera del país. Me ha tocado confluir en diversos contextos, siempre acogiendo la naturaleza pura de los primeros años de vida.
En esta etapa se hace tan necesario abrazar desde el corazón cada detalle… pequeños grandes detalles para que lleguen a concebirse y co-construirse desde una mirada social amorosa, y equilibrada, en donde la justicia y el respeto hacia nosotros mismos y los demás seres nos permita coexistir en armonía.
Sala Niebla ha sido una gran oportunidad para contribuir en este camino, y llevar a cabo el ímpetu de fertilizar el diario vivir de cada niña y niño, que acompañamos con tanto cariño, respetando sus ritmos y características tan auténticas. Asombrarnos con sus luces es y será el fueguito que enciende nuestras mañanas.
